Permitían los mismos beneficios fiscales las cantidades depositadas en otras cuentas bancarias que no recibieran expresamente el nombre de cuenta de ahorro-vivienda, siempre que se cumplieran los requisitos exigidos por la normativa fiscal.
Permitían los mismos beneficios fiscales las cantidades depositadas en otras cuentas bancarias que no recibieran expresamente el nombre de cuenta de ahorro-vivienda, siempre que se cumplieran los requisitos exigidos por la normativa fiscal.